Día Internacional de la Eliminación de la Violencia por motivos de Género
Anualmente se conmemora este día para denunciar la violencia que se ejerce sobre las mujeres, lesbianas, travestis y trans en todo el mundo y reclamar políticas en todos los países para su erradicación. Este día es en memoria y reivindicación a las hermanas y activistas políticas Patria Minerva y María Teresa Mirabal, que el 25 de noviembre de1960, en la República Dominicana, fueron asesinadas por órdenes del dictador Rafael Leónidas Trujillo.
Este año en nuestro país, podemos festejar la creación de un Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad, que tiene presupuesto propio y que anunció algunas políticas relevantes en relación a la lucha que desde hace décadas las organizaciones sociales venimos sosteniendo. Por ejemplo el apoyo económico a mujeres, lesbianas, travestis y trans en situación de violencia y el anuncio de programas de apoyo a organizaciones. Estos programas aún no se han puesto en marcha, o no han llegado a nuestros territorios, pero esperamos que pronto se avance teniendo en cuenta a las organizaciones que día a día y hace años ponemos el cuerpo a las violencias machistas. También hay algunas leyes que se están implementando que aportan a un cambio estructural como la Ley Micaela y la Ley Brisa.
Recientemente desde el Gobierno, se ha presentado un nuevo proyecto de Ley para que el aborto legal sea una realidad. También un proyecto que acompaña a las personas con capacidad de gestar durante el embarazo y los primeros días de vida.
La realidad es que hasta el día de hoy, antes y durante la cuarentena, además de sostener los comedores, abrir ollas día y noche, ampliar nuestras tareas de cuidado para el barrio poniéndole el cuerpo a la pandemia, hemos seguido acompañando a compañeras, amigas vecinas y conocidas ante una situación de violencia o ante una situación de Interrupción Legal de Embarazo. (ILE). Si lo seguimos haciendo es porque ya sabemos que nuestras denuncias no se toman en serio o quedan en la nada, porque efectivamente seguimos siendo nosotras las que tenemos que activar una y otra vez para que los médicos nos den anticonceptivos, para acceder a una atención segura. Porque los femicidios siguen siendo una realidad muy dura. Porque somos nosotras las que seguimos siendo violadas, golpeadas y desechadas.
Por eso seguimos organizadas, por eso no podemos dejar de luchar.
Por eso seguimos exigiendo ser escuchadas.
Porque una vida sin violencias es un derecho, que luchamos por conseguir.
No estamos solas.